Belleza roja de Arantza Portabales

 


 


 

 

Título: Belleza roja

Autor: Arantza Portabales

Editorial: Lumen

 

Sinopsis:

 

La nueva dama de la novela negra española.
Un crimen pasional en Santiago de Compostela.

GANADORA DEL PREMIO FREI MARTÍN SARMIENTO

 

Seis sospechosos cenan en el jardín de una lujosa casa de las afueras de Santiago de Compostela mientras el cadáver de Xiana Alén, de quince años, yace en el suelo anegado de sangre de su dormitorio, como si fuera una instalación artística: sus padres, su tía Lía Somoza —pintora de fama internacional—, una pareja de amigos y la anciana tía de las hermanas Somoza.

 

Todos los indicios apuntan a Lía, pero a los pocos días esta trata de suicidarse y es internada en un hospital. El comisario Santi Abad, con la ayuda de Ana Barroso —una policía joven, fuerte y temperamental con la que le irá uniendo una intensa y conflictiva relación—, deberá destapar los secretos mejor enterrados de los Alén Somoza, una de las familias más poderosas y adineradas de la alta sociedad gallega.

 

 

Opinión:

 

Estuve muy entretenida leyendo esta novela cuyos capítulos cortos y el estilo de la escritora hacen que sea una lectura fluida y ágil, te terminas la obra sin darte cuenta, no se hace pesada (quitando una cosilla que destacaré al final).

 

                 Sigo pensando que las etiquetas para llamar la atención del lector, me ponen algo quisquillosa, «la nueva dama de la novela negra española», nunca me han gustado las comparaciones, Arantza tiene su propio estilo. Atrapa en las primeras líneas. Una cena, seis invitados y un cadáver, cierto que evoca a la gran Agatha Christie, Diez negritos, Asesinato en el Orient Express…, pero toda comparación es odiosa, para mí es un flaco favor, no son  iguales, sí un homenaje a la reina del misterio.

                TODOS los personajes de esta novela se mueven alrededor de un hecho traumático y conduce a una situación violenta donde no creo que ningún lector otorgue la redención. Seis personajes marcados por la soledad individual, el dolor y la violencia, un pasado que regresa como el sonido de millones de avispas, se escucha la amenaza, se siente, pero todavía no se ve.

                Una reflexión, ¿podemos liberarnos? "Y se sentía culpable por haber rezado para que pasase algo que lo hiciese volver. Y pasó. Murió la pequeña Mary". Yo digo que no, nuestro pasado regresa de diversas formas y nos condiciona el futuro, en este caso de una forma siniestra. Quizá no quieran curar la herida, porque para ello deben hurgar dentro y eso es más complicado que dejarla ahí, sintiendo su presencia, pero sin profundizar.

                ¿Qué me falta en esta construcción? Los personajes se mueven por impulsos que actúan sin pensar, una opresión que no les deja razonar, incluso elegir. Entiendo a Xiana, a Inés, a Teo, a Santi, incluso a Fernando y Ana, aunque me hubiese gustado un poco más, pero me falta algo en Sara, un detonante impactante. ¿Por qué ahora? ¿Por qué se va su hija? Pero es lo que desea, quedarse sola con Teo, ella que es tan inteligente, más que Lía, todo emoción y sensibilidad…, Me falta. Me hubiese gustado equilibrio, algún personaje sin tanta mochila, pero no me decepciona en absoluto, soy de personajes con mucha sombra.

                    "Lo peor es pensar en ese día. Me refiero a las horas anteriores. A pensar en ese día como un día normal. A recordar todos los detalles de lo que pasó sin encontrar ni una sola pista de que se iba a acabar ahí". 

                Me gusta la elegancia en la descripción de la escena violenta, sin explicar demasiado, la imaginación humana rellena los huecos. No pierde el tiempo en detalles innecesarios, perfila la habitación de Xiana y la veo con claridad, con cuatro pinceladas que me presentan una imagen fuerte, muy cinematográfica. 

                La trama me atrapa, tiene un regustillo a los clásicos de mi adolescencia, donde la deducción jugaba un papel importantísimo. A mí la resolución no me sorprendió, al principio los giros, donde cada vez era uno el sospechoso, me gustaron, me mantuvieron alerta, ¿qué va a suceder? Mantener la sorpresa del lector, de giro en giro hasta el final inesperado, una buena estrategia. Supongo que para ello se debe rodear de personajes originales, una trama nunca vista y un tema diferente, más allá de los CELOS, que está muy tratado, aquí hay algo más. Y después de tantos años por los estantes de la novela negra, policiaca o de misterio, escribir algo que algún otro escritor no haya narrado, es complicado. Por eso abusar de los giros, puede dar lugar a tramas rocambolescas o poco creíbles, y ya os digo, aquí lo único que no termina de cuajar es los motivos de Sara, el resto más o menos creíble, me gusta.

Arantza asombra en cada página, busca que el lector no pueda prever que sucederá después. Y aunque gané las apuestas, acerca de cómo se desarrollaría la obra, mi placer en esta novela era saber si tenía razón.

El final, muy del estilo de Agatha Christie, eso sí, la reunión de los sospechosos para el esclarecimiento, me encanta, cómo no me va a gustar si adoro a la Reina del suspense. Y el sospechoso, puede dejar al lector decepcionado, el asesino ha tirado balones fuera desde el principio, inclinándonos a pensar en Lía, cómo puede ser el más interesado en la muerte de Xiana, no cuadra, no puede ser, pensarán más de uno que se ha dejado engañar por la pluma de la escritora.

Y que es lo que no me ha gustado nada, la relación Santi-Ana. Me ha resultado pesada y tediosa, damos vueltas y vueltas sobre lo mismo, idénticos diálogos y situaciones.


Belleza roja

 

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