Egipto increíble de Rubén Villalobos
Sinopsis
¿Te has preguntado alguna vez qué chistes se contaban en
el antiguo Egipto? ¿Cuáles eran los castigos más crueles impuestos a ladrones,
asesinos y otros delincuentes? ¿Sabías que había momias premium y low
cost, algunas incluso con sorpresa incluida?
Famosa sobre todo por sus
pirámides, sus grandes templos y sus faraones, la civilización egipcia oculta
aún muchos aspectos desconocidos que fascinan a todos los aficionados a las
culturas antiguas.
En este libro se recogen
cuestiones curiosas, sorprendentes y poco conocidas de la vida en el antiguo
Egipto que arrojan nueva luz sobre esta enigmática, maravillosa y, por
supuesto, increíble civilización.
Opinión
Me fascina la atracción que casi
todo el mundo siente por los misterios de Egipto. Allí donde hay una exposición
de faraones, el éxito está asegurado, he ido a dos en Madrid, y en ambas la
cola fue considerable. Lo desconocido nos atrae.
El
trabajo de los egiptólogos, por ejemplo, la interpretación de los jeroglíficos,
en esta obra Rubén Villalobos nos habla de una imagen, Tutankamón vierte agua en
la mano de su esposa, leed lo que dicen los expertos que significa, ¿hasta que
punto esta interpretación es correcta? ¿Hay algo de fabulación o imaginación?
Llevé el libro en Semana Santa al pueblo entre mis lecturas y otras para los niños. Al
comenzar me di cuenta que su lenguaje estaba escrito para grandes y pequeños, y
planteé una lectura conjunta que fue todo un descubrimiento para ellos y para
mí. Un libro que les introdujo el gusanillo sobre esta cultura tan fascinante.
Es un libro de divulgación escrito, como digo, para niños, adolescentes y
mayores, entretenido y divertido. El objetivo del autor está conseguido,
aprender pasando un buen rato, no vais a dar crédito a las curiosidades que
encontraréis entre sus páginas.
Que
resaltaron mis cuatro compañeros de lectura. Mi hijo se divirtió con el error
en la palabra mummia y sus consecuencias, esas traducciones que han
hecho estragos a lo largo de la Historia; mi hija se sobrecogió con los métodos
anticonceptivo; mi sobrino mayor la momificación de los animales domésticos y
el pequeño, de ocho años, no dejó de reírse durante horas y días ante el
trabajo más importante de la corte faraónica, el guardián del ano y el mozo de
excrementos. Pero hay mucho más, los trofeos de la guerra, qué “robaron” a
Tutankamón y mucho más, pero mucho.
Comentarios
Publicar un comentario