Locos por los clásicos de Emilio del Río

 




 

 

Sinopsis

 

Descubre qué cuentan los grandes autores de Grecia y Roma y por qué nos siguen gustando.

 

Hay un momento mágico de la historia de la humanidad en el que se crean las bases de nuestra democracia, de nuestra civilización, de nuestra cultura; ese momento es de las culturas griega y romana, hace miles de años. Nuestra manera de ver el mundo y afrontar la vida vienen de ahí. La poesía, la filosofía, el teatro, la oratoria, la novela, la historia, la sátira, la fábula, el cuento…, todas estas formas de comunicación las inventan y las escriben por vez primera unos autores geniales, divertidos, inspiradores y estimulantes, llenos de vida, magia y energía: los autores grecolatinos. Este libro es una invitación a descubrirlos y disfrutarlos.

 

 

Opinión

 

Es una paradoja curiosa, la que resalta Emilio del Río, conocemos datos históricos de la antigua Grecia y Roma y nada de los historiadores que lo hicieron posible, como Tucídides. Y que poco evoluciona el ser humano tras leer esos primeros escritos de este historiador.

 

«Qué poco importa a la mayoría la búsqueda de la verdad y cuanto más se inclinan por lo primero que encuentran».

 

                La primera de las manipulaciones es el lenguaje, ya Tucídides lo denunció, «cambiaron incluso el significado normal de las palabras en relación con los hechos, para adecuarlas a la interpretación».

                No temáis, no solo habla de política y manipulación al servicio de los intereses propios, que poco a variado el tema, ya lo leeréis, también hablaremos de erotismo, «El erotismo no radica tanto en lo que se ve o se cuenta, sino en lo que se insinúa», y los clásicos están llenos de insinuaciones. Qué esto no os impacta, y si os digo que Platón ya nos ofreció un avance de El señor de los anillos, ¿no me creéis?

                ¿Qué es o quiénes eran unos trogloditas? ¿Quién fue Apuleyo? Pues aconsejo que lo descubráis para descubrir su relación con La Cenicientas y El Quijote, eso es nada. Me gusta el humor mordaz del escritor en el pasaje del rapto de las sabinas.

 

                Y podía seguir, pero prefiero que cada lector descubra las curiosidades que esconde esta obra, que son muchas.

                Gracias a Espasa y a Pepa Locura de Libros, así como a mis compañeras del club por sus aportaciones.




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