El hombre en busca de sentido de Viktor Frankl

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#Elhombreenbuscadesentido

#ViktorFrankl

Traducción #Comitédetraducciónalespañol

Edita #Herder

 

 


Sinopsis

 

El hombre en busca de sentido es mucho más que el testimonio de un psiquiatra sobre los hechos y los acontecimientos vividos en un campo de concentración. Es una lección existencial capaz de interpelar al lector de cualquier cultura, edad y procedencia. Y es además un clásico traducido a medio centenar de idiomas.

El hombre en busca de sentido es el estremecedor relato en el que Viktor Frankl nos narra su experiencia en los campos de concentración. Durante esos años sintió en su propio ser lo que significaba una existencia absolutamente desprovista de todo, salvo de la existencia misma. Él, que todo lo había perdido, que padeció hambre, frío y brutalidades, pudo reconocer que, pese a todo, la vida es digna de ser vivida y que la libertad interior y la dignidad humana son indestructibles. En su condición de psiquiatra y prisionero, Frankl reflexiona con palabras de sorprendente esperanza sobre la capacidad humana de trascender las dificultades y descubrir una verdad profunda que nos orienta y da sentido a nuestras vidas. La logoterapia, método psicoterapéutico creado por el propio Frankl, se centra en el sentido de la existencia y en la búsqueda de ese sentido por parte del hombre, que asume la responsabilidad ante sí mismo, ante los demás y ante la vida.

 


Impresiones

 

Sigo decidiendo si extenderme o no en mis impresiones, sigo dando vueltas a esos años terribles, a encajar ese dolor y ese sufrimiento en la narrativa de una existencia. «El éxito está en lo que uno supera».

 

«No nos entraba en la cabeza que no los quitarían todo, absolutamente todo»

 

                Para resolver el horror de su interior eligió la catarsis como terapia, vomitar todo lo vivido, verbalizarlo le haría libre de esa carga emocional. Liberarse del rencor y el resentimiento, no olvidar, eso no se olvida, sí superar. Pero para poder escribir cada palabra tenía que posicionarse como un testigo, no como un juez, sorprende, porque es una biografía, es un texto de psicología, la base de la logoterapia. ¿Cómo se veía afectada la piscología de un prisionero en un campo de concentración? La lectura tiene parte de subjetiva, inevitable.

 

«Seguir vivo exigía la muerte de otro»

 

                La Segunda Guerra Mundial, los campos de concentración, pusieron en tela de juicio algunas afirmaciones de los libros de medicina y se produjeron avances médicos, pero ¿a qué precio? Asperger, os dejo que indaguéis. Nadie puede entender el destructivo conflicto mental y la lucha de voluntades que dominan a un ser hambriento. El vacío emocional es lo que mejor expresa la desvalorización de todo lo que no favorece la conservación de la vida. Todo carece de interés si no se relaciona con la preocupación inmediata que es supervivencia personal. ¿Qué erra la felicidad? La ausencia de dolor.

 

«El mero hecho de que un hombre haya sido guarda de campo o prisionero no revela casi nada de él»

 

La bondad humana existió en ambos grupos. De ser oprimido a ser opresor. «NADIE TIENE DERECHO A HACER EL MAL»

 

Un libro fundamental, pese al horror vivido el autor nos ofrece un libro de esperanza. Búsqueda de sentido y responsabilidad personal ante nuestra actitud. Las circunstancias extremas revelan lo mejor y lo peor de cada ser humano. Una obra que habla de la resiliencia humana y la capacidad de superación.  

 

¡Feliz lectura!

 


Autor

 

Es uno de los referentes más destacados de la psicología del siglo xx. Doctorado en Medicina y Filosofía por la Universidad de Viena, fundó la logoterapia, también denominada Tercera Escuela Vienesa de Psicoterapia. En 1942, en pleno apogeo de los nazis, él y su familia fueron hechos prisioneros e internados en los campos de concentración. Fue precisamente esta experiencia la que lo llevaría a confirmar vivencialmente su teoría psicológica (desarrollada en las décadas anteriores) basada en el sentido de la vida y con raíces existencialistas. Tras sobrevivir al Holocausto, fue profesor de Neurología y Psiquiatría en la Universidad de Viena y obtuvo la cátedra de Logoterapia en la Universidad Internacional de San Diego, California. Impartió conferencias en universidades de todo el mundo y 29 de ellas le otorgaron el título de doctor honoris causa. Galardonado con numerosos premios, entre ellos el Oskar Pfister Award de la American Psychiatric Association, fue miembro de honor de la Academia Austriaca de las Ciencias.




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