Todo Mafalda de Quino

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Edita #Lumen

 

La edición monumental y definitiva de todas las viñetas de Mafalda

 

«Mafalda es una heroína de nuestro tiempo», Umberto Eco

Quino se pasó muchos años demostrándonos que los niños son los depositarios de la sabiduría. Lo malo para el mundo es que a medida que crecen van perdiendo el uso de la razón, se les olvida en la escuela lo que sabían al nacer, se casan sin amor, trabajan por dinero, se cepillan los dientes, se cortan las uñas..., y al final -convertidos en adultos miserables- no se ahogan en un vaso de agua, sino en un plato de sopa.

Esta edición definitiva de Todo Mafalda incluye todos y cada uno de los dibujos que su genial creador, Quino, hizo de sus personajes, incluyendo un ingente material inédito.

 

Es tan bonita esta edición, una joya en cualquier biblioteca, una lectura divertida y entrañable. Mafalda forma parte de mi niñez, de mi dislexia, de mis ganas de entender el complicado mundo de las letras, de mis llantos y frustración, «Paren el mundo, que me quiero bajar», yo también me hubiese bajado, me bajaría.

Mafalda llegó a España en 1972, Esther Tusquest publicó en Lumen las primeras tiras de esta entrañable niña argentina, no fui consciente de que era argentina hasta muchos años después, crecí y normalicé el sos y el vos. Mis padres me leían sus viñetas, enseñándome sus dibujos y riendo, todavía me faltaba ingenio para entender a Mafalda, pero si algo sabía es que si mis padres disfrutaban con Mafalda merecía la pena.

 

«Como siempre lo urgente no deja tiempo para lo importante»

 

Mafalda, ¡Ay, Mafalda y su sapiencia!, sensible y observadora, aguda, inquieta, crítica, el humor de Quino en cada bocadillo, cínico y ácido, mete el dedo en la llaga, habla de la miseria y del absurdo comportamiento humano. Mafalda obsesionada con la desigualdad, con los débiles, con un dedo señalando a los poderosos. Mafalda invita a la reflexión, «Los derrotistas son vos; yo no creo que las coas estén tan mal como para tener que tomárselo a broma».

Una niña rebelde, pero con cabeza, no a tontas y locas, con CONCIENCIA. «El mundo no hay por dónde cogerlo».

Marcó mi generación, una pena que un pensamiento tan crítico y reflexivo se pierda, Mafalda es un personaje atemporal, mucho más que un comic. Los niños son el futuro, en ellos recae el peso del mundo que dejamos, me hago eco de las palabras del autor en varias entrevistas, esa sabiduría innata al nacer se va perdiendo con la edad, los adultos volvemos el mundo irracional. El único legado que le dejo a mis hijos es mi biblioteca, entre sus estantes, verdaderas joyas.

 

Mafalda es una heroína de nuestro tiempo como dijo Umberto Eco.

 

 

¡Feliz lectura!