Limpia de Alia Trabucco Zerán
Hi
Sinopsis
La vida tiende a ser así: una gota, una gota, una gota,
una gota, y luego nos preguntamos, perplejos, cómo es que estamos empapados.
Estela deja a su madre en el sur
para trabajar en la casa de una familia en Santiago de Chile y allí se queda
los siguientes siete años, limpiando y criando a una niña acosada por la
ansiedad, cuya muerte conocemos al comienzo de la novela.
Como en una tragedia griega, la
tensión crece con cada página, con cada personaje o elemento: la perra
callejera, las ratas, la confesión inconfesable del «señor», la aparición de
Carlos, el veneno, la pistola, hasta un desenlace tan poderoso como inevitable.
Opinión
«Estoy muerta, Estela.
Como si el cansancio fuese la mayor evidencia de su
éxito»
Desigualdad. Esa sería la palabra
que define esta obra, esas frases elegidas para comenzar mi opinión, la desigualdad
de clases, da igual el país, sería la tema, con la excusa de la muerte de una
niña, la protagonista narra su vida o la ausencia de ella al servicio de una
familia que compara sus ocho horas de trabajo con las veinticuatro de ella, los
7 días de la semana, los 365 del año. «Hasta él consideraría trabajar de
empleada en el Año Nuevo».
«Es necesario recorrer los bordes antes de internarme al
corazón»
Pero
podríamos señalar muchos más aspectos de la novela. Limpia narra la vida de una
niña con padres hipercríticos y exigentes, que sacrifican la vida de su hija
con cientos de extraescolares, que someten a la niña a una presión destructiva.
Padres inflexibles, con orden explícitas que imponen su voluntad y mantienen el
control sobre su hija.
Me encanta el estilo de Alia
Trabucco Zerán, el juego de palabras a lo largo de su novela, ya solo el título
da que pensar, “limpia” como la orden que se le da a Estela o como la exigencia
en su persona, ese delantal blanco impoluto uno por cada día de la semana, uñas
rasuradas y sin restos, esa trenza impoluta.
Una
ligera observación, la muerte de Yany nos sobrecoge más que la de niña, en cuanto
aparece este personaje en las páginas sabemos el tono que tomará la historia y
nuestro corazón se encoge. La muerte de seres vulnerables causa más impacto,
Yany es el ser más vulnerable de la historia, la niña se nos presenta desde el
principio con rabietas y colérica, ni su madre la soporta, se nos recuerda a
ella, fría y exigente. No somos psicópatas, solo personas empáticas sin olvidar
que es una historia de papel.
Muy, muy recomendable.
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